jueves, 30 de junio de 2011

El correcto uso de las comillas

Aprovechando que tengo a los peques entretenidos con los abuelos he podido sacar un rato para ampliar la idea que da razón a este blog y qué mejor manera que hacer unas breves aclaraciones sobre el uso correcto de las comillas, incluso teniendo en cuenta que no soy partidaria de seguir a rajatabla las normas ortográficas, gramaticales o lexicográficas establecidas, sobre todo si vienen de ciertas instituciones ancladas en el pasado e incapaces de adaptarse a los nuevos tiempos.

Precisamente por eso, no considero relevante si las comillas preferentes son las inglesas (“ ”), las latinas (« ») o las simples (‘ ’) pero sí resumir sus diferentes usos e intentar hacer un ejercicio de comprensión con ciertas, por no decir, todas las publicaciones referidas a los indignados, desde que se inició el movimiento 15M.

Veamos el siguiente ejemplo, publicado el 25 de mayo en la edición digital de El Mundo, aunque podría ser aplicable a cualquier otro medio:


Creo que el entrecomillado de “No paréis” está claro y enmarca la reproducción de la cita textual del señor Punset. Pero, ¿cuál de sus usos aplicaríais a “indignados”?
  1. Lógicamente quitamos citas, palabras en estilo indirecto o pensamientos de personajes literarios.
  2. Aunque corresponde al título de un libro me atrevería a decir que no están haciendo referencia al mismo.
  3. No categorizaría tampoco a El Mundo como obra lingüística de tal modo que su intención fuera/sea enmarcar su significado.
  4. Podría ser incluso que fuese esa práctica a la que acostumbran los medios de copiar la noticia directamente de agencia, pero no, en este caso han hecho el esfuerzo de trascribirlo, salvo alguna que otra frase y debe ser que se le escaparon las comillas porque en la fuente original no estaban.
  5. Así que sólo me queda una opción y por favor permitidme reproducirla literalmente tal y como lo recoge el Diccionario Panhispánico de Dudas:
    Para indicar que una palabra o expresión es impropia, vulgar, procede de otra lengua o se utiliza irónicamente o con un sentido especial.
Siendo esta última la única opción viable, realmente es para estar indignados o de lo contrario que alguien me explique que tiene de impropio, de vulgar, de extralingüístico, de irónico o de especial el enfado, la ira o el enojo. Ya iba siendo hora de indignarse con el poder establecido (bancos, política, empresas y medios), pero también con nosotros mismos por estar tanto tiempo de brazos cruzados creyendo que se estaba produciendo el milagro de los “panes y los peces”.

2 comentarios:

  1. Hola Carmen, descubrí la pasada noche tu blog a traves del blog maldiaparadejardefumar, tus dos primeros articulos me gustan y mucho es por esto que me he hecho tu seguidora, comparto tu opinion de que gran parte de culpa la tenemos tambien nosotros mismos, los milagros no existen y creer en ellos para mi es equivocarse. Besos y te deseo lo mejor para tú blog.

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  2. Hola Loli, qué ilusión leer tu mensaje. Llevo muy poquito con el blog, pero creo que va siendo hora de empezar a “alzar la voz”. Entiendo que “los altos mandos” (por llamarles de algún modo) no han hecho ni hacen las cosas bien, pero nosotros les hemos dejado.
    Yo también me he pasado por tu blog y tienes cosas preciosas. La costura nunca se me ha dado muy bien, aunque he de reconocer que el punto de cruz me relaja.
    Gracias :)

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